Mi retoña
Hace unos añitos atras el hedonismo era pleno en mi vida, tenia bastante trabajo y muy bien pagado, no habia cosa que se me antojara y no la comprara, podia dormir todo el tiempo que se me antojara, ir y venir a mi antojo. Pero algo sucedio un dia llego un paquetito de 3 y 1/2 kilos y todo empezo a ser diferente habia que despertar en la madrugada o muy temprano o mas tarde o todo junto, el trabajo fue menos, por consiguiente el dinero, habia que decidir si comprar una caguama o un litro de leche, un paquete de pistachos o uno de pañales, la invasion a mi comodidad era total, habia que hacer algo con esta enana invasora que en los primeros instantes tenia mas parecido con el Papa o con E.T. que con algun miembro de la familia o de la especie humana. Esta monstruita no me ganaria. Pero al final, gano. Hoy no hay accion que realice que no vaya encaminada a darle alguna satisfaccion a ella o a mi adorado tormento(mi otra niña grande, conocida como mi esposa). En fin, sigo siendo un hedonista, aunque eso este limitado a algunos fines de semana y que la retoña me de chance. Pero mi gran placer es ver a esta enana recibirme cuando llego cansado, sonreir y decirme "te quiero mucho papito".
1 Comentarios:
bien dicho mi buen, bien dicho...
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